Ubicación: Ideal en exteriores.
Luminosidad: Dependiendo de su crecimiento puede ubicarse a media sombra o bajo luz solar directa.
Riego: Dos veces por semana en los meses más calientes del año; y en los otros se puede regar cada diez o catorce días.
Temperatura: Se adaptan bien al calor y al frío. Se recomienda plantarlos en primavera y otoño, teniendo la previsión para que se puedan arraigar antes de los tiempos helados.
Problemas que afectan la planta: Herbicidas naturales como el romero, y la albahaca, repelen a los insectos de manera natural.