Esta palmera perennifolia del este de Asia es muy apreciada por su porte, resistencia y la forma de sus hojas que miden entre los 20 y 30 centímetros.
Su belleza radica en la forma de sus hojas compuestas de veinte o más folíolos estrevhos de color verde oscuro, dispuestos en forma de abanico.
Esta planta es sensible a las heladas y no soporta temperaturas inferiores a los 15°C.